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EL Pleno del Ayuntamiento de Bargas ha acordado el 25 de octubre la modificación de las Ordenanzas Fiscales para 2018.
Por tercer año consecutivo se reduce el tipo de gravamen del IBI y se mantienen los tipos en los restantes impuestos municipales; este hecho y teniendo en cuenta la inflación ocurrida en 2016 y la prevista en 2017 supone una reducción de la presión fiscal en un 3,5% a lo largo de esta legislatura.
La reducción ha sido posible por la buena situación financiera de la Corporación que permite compaginar la prestación de los servicios públicos, el adecuado ritmo de inversiones y la solvencia financiera. En la actualidad la deuda del Ayuntamiento es solo de 228.810 €., deuda que podría liquidarse en el próximo ejercicio.
Ya en el ejercicio de 2016, se produjo una reordenación de las Ordenanzas Fiscales de manera que a la reducción de la presión fiscal en términos reales se añadieron una serie de bonificaciones en el IBI, el IAE y el Impuesto de Construcción a las empresas que crearan empleo.